¿Os habéis preguntado alguna vez por qué hay personas que tienen ojos de distinto color? Os juro que esta era una duda que solía pasar por mi mente de vez en cuando; hasta que decidí aclararla por completo. Después de todo, era una de las curiosidades de la genética y los rasgos que heredamos que desconocía totalmente. Así que, hoy os comparto la razón de esto y otros datos interesantes.

Los padres tienen entre manos la importante tarea de elegir el nombre sus hijos. Sin embargo, en lo que a los genes se refiere, no tienen ni voz ni voto. Y es que, aunque gracias a la genética heredamos muchos rasgos y características de nuestros antepasados, no es un tema de elección.

Esta es la razón de por qué hay personas que tienen ojos de distinto color a las de otras; incluso perteneciendo a la misma familia. En orden de frecuencia, podéis ver ojos marrones, azules y verdes, estos últimos son menos recurrentes.

Pero, aparte de esto, también están aquellos individuos que tienen cada ojo de un color distinto, o bien dos tonalidades diferentes en el mismo iris.

Esto se debe a una alteración conocida como Heterocromía. Y una de sus curiosidades es que afecta a un bajo porcentaje de la población mundial. ¿No os parece más que interesante?

¿Qué sucede con la heterocromía?

Aunque el color de los ojos es un rasgo genético, hay otros factores que intervienen en él. Por ejemplo, podéis tener los iris marrones, pero en una tonalidad más clara u oscura que la de otros individuos.

Esto se debe a la concentración del pigmento melanina presente en cada iris (en su cara interior). Y es la razón de por qué, en los bebés, los ojos pueden ser mucho más claros, generalmente azulados, y luego van adoptando su color definitivo, ya que la melanina es escasa.

Ahora bien, en cuanto a qué es la heterocromía del iris, este es el nombre médico para la anomalía en la que una persona tiene cada iris de un color diferente. Y, dentro de la misma, podéis diferenciar cinco tipos:

Heterocromía completa

Se considera una condición muy poco frecuente, por lo que no es tan probable que la veáis en alguien. Y es cuando un individuo tiene un ojo de color marrón y el otro azul; seguramente la habéis notado alguna vez en algún gato o un siberiano.

Heterocromía parcial

Podéis haceros una idea de sus características a partir de su nombre, y sí, es la heterocromía en la que solo un ojo tiene una zona de color diferente.

Heterocromía central  

Esta es mucho más habitual, y podéis apreciarla como un iris en el que el centro es de un color y la parte externa de otro.

La heterocromía central no suele presentarse con ninguna otra patología, más bien se produce durante el desarrollo.

Heterocromía congénita

El tipo de heterocromía más extraño y que está presente desde el nacimiento. Una de las curiosidades de esta, es que suele relacionarse con patologías raras, como la neurofibromatosis o el síndrome Claude-Bernand-Horner.

Heterocromía adquirida

Por último, está la heterocromía adquirida que, si su nombre os da una pista, es aquella que es consecuencia de algún traumatismo, enfermedad, inflamación ocular o a raíz de otros causantes. En este caso, la persona nace con los ojos del mismo color y, en algún punto de su vida, uno de estos experimenta el cambio de tono.

Puede pareceros un poco complicado, pero el por qué hay personas que tienen ojos de distinto color realmente es un tema interesante y que podéis manejar desde sus curiosidades.

Y vosotros, ¿conocéis a alguien con heterocromía? Si la respuesta es no, no os preocupéis, también podéis ver esta condición en algunas mascotas, como perros o gatos.