Nuestras manos son un prodigio de la evolución, en muchas ocasiones no les prestamos la atención que se merecen, pero deberíamos pararnos de vez unos cuando unos segundos en reflexionar que la humanidad no sería lo que es hoy en día sin nuestras manos (sobre todo por el pulgar).

Lo cierto es que nuestras manos dicen mucho más sobre nosotros de lo que pensamos. Desde la antigüedad han existido estudios y creencias acerca de la interpretación tanto de las líneas de las manos, que suele ser lo que todo el mundo conoce, así como la forma de las mismas y la longitud de los dedos, que suele ser un aspecto bastante más desconocido.

A decir verdad, yo tampoco había reflexionado mucho sobre este aspecto, pero desde que empecé a conocer todo lo que nuestras manos pueden decir sobre nosotros, cada día presto más atención a los detalles tanto de mis propias manos cómo las del resto de personas con las que interactúo día a día, y la verdad es que puedes obtener información muy interesante.

El dedo anular

Nuestro dedo anular suele ser conocido por ser el que utilizamos, en muchos lugares del mundo, para llevar el anillo cuando una persona está casa o prometida.

Pero también puede dar información sobre nuestro nivel de testosterona. Se sabe que normalmente los hombres, tienen el dedo índice más corto que el anular, pero en los casos en que el dedo anular es más corto que el índice, suele ser indicativo de que los niveles de testosterona de esa persona son bastante elevados.

Esto se puede producir indistintamente en mujeres y hombres, por lo que es una información bastante interesante.

Otra de las interpretaciones de la longitud del dedo anular es sí se trata del dedo más largo de tus manos. Esto suele indicar que la persona tiene una predisposición muy elevada a la generación de dinero y a los negocios, así que, si es tu caso, quizás quieras emprender un negocio porque seguro que te va a ir perfecto.

El dedo índice

Como en el caso del dedo anular, la longitud de nuestro dedo índice puede ser un indicativo importante respecto a la salud de la persona. En los casos en que el índice es más corto que el resto de dedos, hay una mayor probabilidad de sufrir una enfermedad ósea llamada osteoartritis.

Este trastorno está asociado a una pobre actividad física y a una carencia importante de estrógenos, afectando principalmente a las mujeres. Aunque no es un indicativo fiable al cien por cien, es interesante tenerlo en cuenta y no está de más hacer alguna revisión con nuestro médico al respecto.

El dedo meñique

El dedo meñique también tiene algo que decir acerca de tu personalidad.

En el caso del dedo más pequeño de nuestra mano, debemos concentrarnos en la longitud de nuestras falanges concretamente.

Como sabrás, cada uno de nuestros dedos está dividido en tres falanges o secciones, en el caso del meñique, la longitud de cada una de ellas con respecto a las demás, son indicativos de la personalidad de la persona.

Por ejemplo, si la primera falange es la más extensa, suele asociarse a personas atractivas e interesantes, aparte de poseer habilidades de lenguaje y observación bastante notables.

Si, por el contrario, la parte más extensa de tu meñique es la segunda, significa que eres determinado y tienes una gran necesidad de ayudar en todo lo que puedas a los demás, por lo que suele ser un rasgo que muchas personas dedicadas al sector sanitario tienen.

Por último, las personas que tienen la tercera falange más larga suelen ser personas muy honestas, por lo que casi siempre dicen la verdad y lo que piensan realmente. Además, sus habilidades sociales y verbales destacan por encima de la media.

Tus dedos y la salud

Pero no sólo la longitud de los dedos puede darnos información sobre la salud, el estado de los dedos también es un buen indicativo de nuestra salud.

Por ejemplo, los dedos hinchados pueden ser un indicativo de un exceso de sal en nuestra dieta, pero si te pasa al menos una vez a la semana, es posible que tus tiroides estén dando señales de mal funcionamiento, esto, sumado a un aumento de peso, son señales que tus manos te dan de que algo no está funcionando como debería.