9 destinos para escapar del invierno: Atlántico

9 destinos para escapar del invierno: Atlántico

Olas de frío, vórtices polares, ciclogénesis explosivas… todo nos suena, y lejos de ser nombres de ataques especiales de algún videojuego, son en realidad nuestra peor pesadilla a la hora de lidiar con lo que en estos lares llamamos invierno

Sin embargo, amigo nómada, no está todo perdido. A algunas millas de aquí hay sol, calor y terrazas al aire libre donde tomar una cerveza fresquita sin chaqueta. Haz las maletas y ven conmigo, porque nos vamos a ocho de los destinos más cercanos donde poder escapar y no llegar a odiar tanto el invierno continental: los primeros cuatro, en el mismísimo Océano Atlántico.

1- Azores

No es por nada se llama Anticiclón de las Azores al sistema que influye en el clima de buena parte de Europa y África, pues nos encontramos en uno de los puntos más tranquilos del Atlántico, aun estando en mitad de este, literalmente, en la conocida como Macaronesia.

Las Islas Azores son un conjunto de islas portuguesas a tres mil kilómetros de la Península Ibérica que tiene un clima tan benigno como húmedo -no se puede tener todo- pero que por ello mismo dispone de un gran manto verde de vegetación tropical que cubre todas las islas. Puedes escoger cualquiera de las nueve islas que lo componen y desplegar allí tu toalla o, aún mejor, hacer una buena ruta de senderismo en manga corta, que siempre se precia en invierno.

Volcanes activos, piscinas termales, lagos y más lagos y vacas y más vacas. El clima, a pesar de no escalar en el mercurio como puede suceder en las Canarias, mucho más al sur, mantiene casi siempre una agradable temperatura ideal para practicar deporte o simplemente no cargar con tu parka todo el día. Puedes leer más sobre las Islas Azores en este otro artículo, por si hace falta que te convenza.

3- Madeira

Muy cerca de las Canarias se encuentra este otro conjunto de islas portuguesas, mucho más pequeño, pero con un encanto especial y demasiado infravalorado, aunque la verdad sea dicha está muy de moda visitar Madeira en invierno. 

Casa del jugador Cristiano Ronaldo (gancho para los amantes del fútbol) la isla de Madeira no es la única de este pequeño archipiélago, pues no podemos olvidar Porto Santo, tan pequeña que el aeropuerto cruza literalmente la isla de norte a sur. Cuidado al buscar alojamiento, ya que el conjunto del archipiélago se llama igual que la isla principal: Madeira.

Montañas increíbles que nos recordarán a Perdidos, una temperatura más que agradable y acantilados cortados a pulso sobre el Atlántico, será el lugar perfecto para una escapada de fin de semana o una semana entera en busca del calor del invierno, allí donde lo haya.

2- Las Islas Canarias

Un clásico, lo sé, pero no podíamos dejar de añadir estas islas tan de aquí pero tan de allí. Las Islas Canarias, déjame que te cuente, es un archipiélago de ocho islas, cinco islotes y ocho roques que destacan por ser variadas y muy diferentes entre sí.

¿Eres de los bosques de laurisilva de Gran Canaria, las montañas verticales de El Hierro, los paisajes lunares de Tenerife o las dunas de Fuerteventura? Todo turista tiene cabida en las Canarias, pues siempre hay una isla para ti, y siento si no puedo añadir aquí todas las islas, pues nos quedaríamos sin artículo para el siguiente destino.

Gastronomía, astronomía, cultura, tradiciones y su habla tan propia. Todos estos son algunos de los alicientes que tiene ir a Las Canarias, ya sea en invierno o en verano, aunque mejor en invierno, la verdad sea dicha. Sea como fuere, de momento ve leyendo este artículo sobre las maravillas de Tenerife.

4- Cabo Verde

Un poco más al sur y para bolsillos algo más exigentes encontramos las islas de Cabo Verde, antigua colonia portuguesa -sí, también- y ahora estado soberano de un pequeño grupo de islas frente a la costa africana, en concreto muy cerca de la ciudad de Dakar.

Cabo Verde es un destino en auge últimamente gracias a su cocina única, aunque su gran atracción es el avistamiento de ballenas, delfines y tiburones, así como ser testigo distante de la puesta de huevos de la tortuga boba en las interminables playas de Cabo Verde.

Su clima es totalmente tropical, siendo los meses de verano una temporada desaconsejada para aterrizar en estas islas. Las más visitadas son Sao Vicente, Boa Vista y Sal: con esos nombres no pueden decepcionar. En esta última, podemos encontrar un verdadero pedazo del desierto del Sáhara que ha viajado con el viento hasta estas tierras con sus dunas y todo.