Las 8 islas paradisíacas que tienes que visitar una vez en la vida

Las 8 islas paradisíacas que tienes que visitar una vez en la vida

Soñamos con playas de arena blanca, aguas cristalinas y una hamaca perfectamente ubicada bajo la sombra de una palmera. Y, aunque parezca un capricho de Instagram, hay islas en el mundo que son exactamente así (e incluso mejores cuando ya estás allí). Así que, si tu idea de la felicidad se basa en un cóctel en la mano, la puesta de sol sobre la arena y solo el sonido de las olas de fondo, aquí tienes una selección de las islas más paradisíacas del mundo:

1. Bora Bora, la joya de la Polinesia Francesa

Bora Bora es el equivalente a lo que imaginaría un artista si tuviera que pintar el paraíso. Con sus cabañas flotantes, sus lagunas turquesa y su monte Otemanu dominando el paisaje, esta isla lo tiene todo. No hay más que decir: si estás leyendo esto, es que te gustó la foto de portada: es Bora Bora. Consejo práctico: si no quieres vender un riñón para pagarte la estancia, considera visitarla en temporada baja, es decir, nuestro invierno. Y si te sientes aventurero, cambia los resorts de lujo por una casa de huéspedes local que, de haberlas, haylas.

2. Maldivas: el lujo llevado al extremo

Las Maldivas son lo más cercano a una postal viviente. Un archipiélago de más de mil islas coralinas donde el azul del mar parece editado con Photoshop. Se trata de un destino perfecto para lunas de miel o simplemente para desaparecer del mapa durante unos días. Secreto: muchas islas locales ahora ofrecen hospedaje accesible (las encontrarás literalmente como local islands, como Thulusdho o Gulhi), así que no todo tiene que ser resorts de cinco estrellas, como ya comentamos en nuestro artículo sobre las Maldivas low cost. Eso sí, prepárate para comer mucho pescado, porque aquí es casi una religión.

3. Seychelles, donde la naturaleza es protagonista

Las Seychelles son un refugio de biodiversidad. Más allá de sus playas de ensueño, este archipiélago africano cuenta con selvas exuberantes y tortugas gigantes que parecen de la prehistoria. Consejo importante: alquilar una bicicleta es una de las mejores formas de explorar islas como La Digue, donde la vida se mueve a otro ritmo y los coches son una rareza.

4. Santorini, el amor hecho isla

Quizá Santorini no tenga las playas de arena blanca que imaginas, pero sus acantilados, sus casas blancas con techos azules y sus atardeceres de novela la convierten en una de las islas más fotogénicas del planeta. Truco de experto: evita las aglomeraciones madrugando para explorar Oia antes de que lleguen los cruceros: un martes de invierno a las siete de la mañana parece ser la mejor opción, por desgracia. Y si buscas algo más auténtico, prueba la gastronomía local en tavernas menos turísticas.

Fuente: Shutterstock

5. Filipinas y sus joyas ocultas

Cuando se habla de islas paradisíacas, las Filipinas a menudo quedan fuera del radar: error. El Nido y Coron, en la región de Palawan, tienen algunas de las aguas más espectaculares del mundo, con lagunas secretas y arrecifes de coral impresionantes. No te limites a los tours clásicos y alquila un barco privado con amigos y descubre rincones que la mayoría de turistas nunca ven.

6. Isla Mauricio, el secreto mejor guardado del Índico

Mauricio es más que playas espectaculares. Su cultura, una mezcla de influencias africanas, indias y europeas, le da un carácter único. Entre las cosas que no puedes perderte está el Parque Nacional Black River Gorges, ideal para hacer senderismo entre cascadas y bosques tropicales. Visita la Tierra de los Siete Colores, un fenómeno geológico alucinante que parece sacado de otro planeta.

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7. Kauai, el corazón salvaje de Hawái

¿Echas de menos la serie de TV Perdidos? De todas las islas hawaianas, Kauai es la que mejor conserva su esencia natural. Conocida como «la Isla Jardín«, sus acantilados, valles y cascadas la convierten en un destino soñado para los amantes de la naturaleza. Secreto mejor guardado es la playa de Polihale, accesible solo por un camino de tierra, pues hablamos de un lugar casi virgen donde ver el atardecer en completa soledad.

8. Fiji, un paraíso sin complicaciones

Fiji es ese lugar donde la gente te recibe con una sonrisa sincera y un «Bula!» (su saludo tradicional). Más allá de sus playas perfectas, este archipiélago tiene una cultura vibrante y un panorama de buceo espectacular. Algunas de las islas más bonitas son accesibles solo por barco, así que asegúrate de organizar bien los traslados, y no te pierdas la ceremonia del kava, una bebida local con un ligero efecto relajante.

Si tu idea de felicidad aún es estar rodeado de mar turquesa, arena suave y una brisa perfecta, cualquiera de estas islas hará que quieras dejarlo todo y mudarte allí (o al menos, prolongar tu estancia más de lo previsto). Ahora solo queda la parte difícil: elegir cuál visitar primero.