Con el verano llega el calor y el aumento de las temperaturas hacen insoportable algunas horas centrales del día. Sudamos, andamos sofocados/as, nos cuesta más movernos, dormimos peor… seguro que a muchos/as os suena…

Y no hay que olvidar que, si salimos a la calle, en días muy calurosos hay que extremar la precaución para evitar sufrir golpes de calor, sobre todo, los colectivos más vulnerables.

En serendippias queremos ayudaros a sobrellevar el calor de la mejor forma posible. Por eso en este artículo queremos darte algunos consejos para combatirlo y estar un poco más frescos. Sobre todo, en aquellos lugares donde la tónica habitual es que se superen los 30 grados.

1-      Evita salir en las horas centrales del día

Parece algo obvio, pero conviene recordar que, en las horas que hace más calor (entre las 12:00 y las 18:00h), donde mejor y más seguro se está es en casa. Si esto no fuera posible, intenta caminar por la sombra o hacer el trayecto en vehículo propio o transporte público hasta la llegada a tu destino.

2-      Hidratación

La hidratación es fundamental en verano por lo que conviene beber bastante agua; ya que nuestro cuerpo pierde más agua con las altas temperaturas. Evita las bebidas con cafeína, alcohol o azucaradas ya que favorecen la deshidratación.

3-      Ropa

Utiliza ropa holgada, ligera y de tejidos naturales y transpirables, de colores claros. Utiliza sombreros o gorra y gafas de sol. El calzado debe ser cómodo, flexible y, al igual que la ropa, también transpirable.

4-      Alimentación

Evita las comidas copiosas, muy calientes y/o altas en grasas, ya que favorecen la retención de líquidos y la pesadez de estómago. Por el contrario, apuesta por las frutas y verduras frescas, como por ejemplo las que os recomendábamos en el post “8 alimentos saludables imprescindibles en verano”.

5-      Ventilación del hogar

Baja las persianas y cierra las ventanas durante el día para evitar que el calor entre. Lo mejor es abrirlas por la noche y por la mañana pronto para ventilar. Permanece en las habitaciones más frescas e intenta minimizar el uso de luces.

6-      Duchas

Siempre que tengamos calor podemos recurrir a duchas cortas con agua tibia. Especialmente recomendable es darnos una antes de ir a dormir para conciliar mejor el sueño.

Además de todos estos consejos, no olvides utilizar protección solar cada vez que vayas a salir a la calle, no sólo para no quemarnos sino también para evitar problemas de piel por sobreexposición solar.