Si hay algo en común en todas las zonas de España es que el verano, por regla general, es caluroso. Para sofocar las altas temperaturas, el aire acondicionado es el principal compañero en los días veraniegos. Si sueles utilizarlo mucho en casa, a continuación vamos a explicarte cómo utilizar este aparato de climatización de forma eficiente.

1.- Elegir la ubicación ideal para el termostato

Si no lo sabías, el termostato es el elemento cuya función es medir la temperatura de forma constante y entonces da la orden al aparato de aire acondicionado de encenderse o apagarse según los parámetros que hayas establecido previamente. La ubicación es fundamental ya que hay factores que pueden desvirtuar la medición como son:

• Otro electrodoméstico.
• Corriente de aire.
• Calor del televisor.

Esto puede hacer que tu aire acondicionado no se encienda cuando debiera y, por tanto, consuma más electricidad de la necesaria.

2.- Decantarte por el equipo más adecuado

En el mercado vas a poder encontrar un sinfín de aparatos de aire acondicionado. Para elegir el más acorde para ti, debes considerar el tamaño de la estancia de tu hogar en la que lo vas a instalar. Asimismo, será primordial que las ventanas estén aisladas. La orientación de la habitación es también un factor a tener en cuenta para elegir uno u otro modelo. Si está orientada al sur, será más calurosa y necesitarás un equipo más potente. En cambio, si está orientada al norte, será más fresquita en verano y fría en inverno, por lo que el aire acondicionado debe contar con una bomba de calor potente.

3.- Utilizar las funciones ECO

Hoy en día, todos los aires acondicionados suelen contar con una función ECO. Esta llega a reducir el consumo un 30%, lo que supone un significativo ahorro en la factura de la luz. Además, el Modo Night desconecta también el equipo pasadas unas horas.

Algunos equipos incluso cuentan con un detector de presencia, por lo que si enciendes el aire y sales de la habitación y pasa un tiempo prudencial, el aire acondicionado no detecta personas y se apaga o ralentiza su funcionamiento.

4.- Usar la función deshumectación

En zonas de playa o días en los que haya mucha humedad, esta función (a pesar de no estar pensada para enfriar) es perfecta para eliminar esta humedad del ambiente y que elimina parte de ella y reduce la sensación de sofoco, mejorando así el confort sin tener que llegar a emplear todo el potencial del equipo y consumiendo, por tanto, menos energía eléctrica.

Y tú, ¿sabías que con estos trucos podrías llegar a gastar menos en tu factura de la luz usando el aire acondicionado?